Universidad
Politécnica de Madrid

07.06.2016

Pablo Morales estudia el grado de Ingeniería Civil en la ETSIC-UPM. En diciembre fue elegido por sus compañeros Delegado de Alumnos de la UPM. Medio año después, hace balance, analiza la situación de la educación en España y anima a los jóvenes, especialmente a las mujeres, a estudiar en la UPM, convencido de que “la ingeniería determina el futuro”  del que las mujeres pueden ser protagonistas.

Pregunta: ¿Qué valoración haces de estos meses al frente de la Delegación de Alumnos de la Universidad Politécnica de Madrid?

Respuesta: Estamos acercándonos ya al ecuador del mandato, y podría decirse que en líneas generales estamos cumpliendo con los objetivos que nos marcamos al comienzo del mismo. No obstante, aún queda mucho trabajo por hacer. Tenemos muchas iniciativas y proyectos planteados que se han ralentizado en estos meses, al coincidir con las elecciones a rector de nuestra Universidad y el periodo de transición entre equipos rectorales. Pero confío en que al acabar nuestro mandato habremos conseguido mejorar la vida universitaria de los estudiantes de la UPM y el funcionamiento de todas las delegaciones.

P.- Tu primera experiencia en la representación estudiantil fue en 2012 como subdelegado de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Civil. Desde entonces, has  desempeñado distintas responsabilidades hasta convertirte en Delegado de Alumnos de la Universidad. ¿Qué te llevo a dar el paso de dedicarte a representar a los otros estudiantes en la UPM?

R.- Sentí la necesidad de cambiar muchas cosas dentro de mi Escuela que, afortunadamente, en estos años han mejorado. Sin ir más lejos, la propia Delegación de mi Escuela pasó de no tener actividad a conseguir un equipo de gente trabajadora y comprometida que ha revitalizado tanto la Delegación como la Escuela.

P.- Medio año al frente de la Delegación, ¿cuáles han sido los problemas más graves con los  que te has encontrado?

R.- Por fortuna, vivimos un tiempo menos convulso en términos universitarios, pero siguen  las dificultades. Creo que los problemas más duros son los que afectan directamente a estudiantes en situación vulnerable, ya sea académica o económicamente; o por asuntos de cualquier otra índole.

Es cierto que hay un problema permanente: el desconocimiento, por parte de profesores como de estudiantes, de las normativas académicas y de evaluación, que hace que con frecuencia se actúe de forma injusta contra muchos estudiantes. El día que consigamos aplicar de manera justa estas normativas, la vida académica será mucho más cómoda para todos.

P.- ¿Cuáles consideras que han sido los principales logros en este tiempo?

R.- Estamos potenciando intensamente las relaciones entre Delegaciones. A día de hoy, creo que  existe una mayor colaboración entre los representantes de estudiantes de la que ha existido en el pasado en nuestra Universidad. Por otro lado, considero que estamos mucho mejor posicionados en lo que respecta a las relaciones de la Delegación UPM con otras de la Comunidad de Madrid, de España y, especialmente, con las Politécnicas, a través de UP4.

P.- “Juntos hacemos delegación” es el lema bajo el que enfocaste tu programa. ¿Sientes que los estudiantes se implican lo suficiente en las propuestas de la Universidad?

R.- Esa es la eterna lucha de la representación estudiantil, conseguir la implicación de los estudiantes en los problemas de la Universidad. Hace unos años, cuando las autoridades políticas acometieron los mayores ataques que ha sufrido la educación superior, los estudiantes se implicaron de forma especial en estos problemas. Actualmente hay menos participación, si bien hay que destacar el gran número de estudiantes que colaboran estrechamente con las delegaciones de sus Centros, pese a las duras exigencias académicas de nuestra Universidad, lo que hace que la mayoría estén realizando un fantástico trabajo.

P.- Entre los objetivos de tu programa electoral está conseguir que los estudiantes tengan una mayor participación en los órganos de gobierno de la UPM. ¿Cuáles son vuestras propuestas en este campo?

R.- Para que exista mayor participación en los órganos de gobierno es necesario que se conozca cuál es su función. Una de las iniciativas que hemos desarrollado en este sentido fue la campaña “Tú eliges, tú decides” durante las pasadas elecciones a rector, que creo que sirvió para implicar a los estudiantes en un proceso tan importante. Otro de los frentes para mejorar la participación es captar nuevos representantes. Se trata de una labor “de pasillo” que depende en gran medida de las Delegaciones de Centro, y en ese sentido apoyaremos a todas ellas en lo que sea necesario.

“La UPM enseña a sus estudiantes a enfrentarse
a cualquier tipo de reto que se les pueda presentar en el futuro”

P.- Estos días los estudiantes se enfrentan a la Prueba de Acceso a la Universidad. ¿Qué consejos les darías para afrontar los exámenes?

R.- Es fundamental afrontar la PAU con tranquilidad, al fin y al cabo el temario es el mismo que acaban de superar en el bachillerato, por lo que no deben temer estas pruebas. Todo lo que les van a preguntar lo conocen ya sobradamente.

P.- Y, ¿por qué estudiar en la UPM?

R.- La UPM es la mejor Universidad tecnológica de España, pero creo que no debemos centrarnos solo en la increíble formación técnica que proporciona. Enseña a sus estudiantes a enfrentarse a cualquier tipo de reto que se les pueda presentar en el futuro. Además, la proyección exterior de la UPM les abrirá muchísimas puertas, tanto en el futuro como durante el periodo que pasen estudiando con nosotros.

Por otro lado, las asociaciones, clubes y delegaciones de la UPM realizan infinidad de actividades que harán que la vida universitaria de los futuros estudiantes no sea solo estudiar, sino también conocer gente con sus mismas inquietudes y participar en multitud de proyectos increíblemente constructivos.

P.- ¿Qué opinión te merece el nuevo proceso selectivo que se propone para acceder a la Universidad? ¿Crees que es el adecuado?

R.- La presión de rectores y estudiantes ha conseguido un modelo menos malo del previsto por el Gobierno. Aun así creo que esta es una oportunidad perdida para mejorar el sistema de acceso a la Universidad, queda mucho trabajo por hacer para que la prueba garantice la igualdad de oportunidades y refleje la realidad de cada estudiante.

P.- Faltan vocaciones tecnológicas entre los jóvenes, especialmente entre ellas. En la Delegación de Alumnos tenéis mucha presencia femenina, ¿qué dirías a las chicas que dudan en elegir una de nuestras titulaciones?

R.- Hay que concienciarlas de que la ingeniería es el motor para el desarrollo de cualquier sociedad y de que este desarrollo no se puede acometer sin ellas. En sus manos está construir un futuro igualitario a través de la tecnología, la innovación y la ingeniería de vanguardia.
La ingeniería determina el futuro y ellas pueden ser las protagonistas de ese futuro.

P.- Estamos inmersos en un proceso de cambios políticos que en muchos casos afectan directamente a la educación. Progresivo encarecimiento de las tasas, falta de ayudas, modificaciones en las pruebas de acceso a la universidad… ¿Cómo ves el futuro de la educación pública?

R.- La educación pública en general, y la Universidad en particular, ha sufrido durante los últimos años una batería de ataques constantes desde las instituciones del Estado y de algunas Comunidades Autónomas. La incursión de nuevas fuerzas políticas en el panorama nacional, así como la disolución de las mayorías absolutas que han imperado en el pasado reciente, favorecerá, desde mi punto de vista, un clima de diálogo y de conciliación que permitirá a los agentes sociales, participar más activamente en las políticas educativas. En este sentido, tanto las autoridades académicas como los estudiantes, debemos aprovechar la oportunidad que este nuevo escenario nos brinda para hacer llegar a las instituciones la realidad de los problemas que sufre la Universidad en todas sus vertientes. Si no dejamos pasar este tren, podremos garantizar un futuro próspero para la educación pública.

“El primero de los retos del futuro Gobierno
debe ser frenar el deterioro de la educación en todos sus ámbitos”

P.- En breve, nuevas elecciones. ¿Qué retos crees que debe afrontar el gobierno que salga de las urnas el próximo 26 de junio, en materia de educación?

R.- El primero de los retos del futuro Gobierno debe ser frenar el deterioro de la educación en todos sus ámbitos. Sería necesario un cambio de paradigma en el que vuelva a entenderse la educación como una inversión del Estado en el futuro del desarrollo del país y de sus habitantes. Debemos comprender que la educación es un valor inmaterial del Estado y que por lo tanto no debe cuantificarse en términos económicos.

Separar el concepto de rentabilidad económica del concepto de educación, para así poder implementar políticas públicas que tiendan a salvaguardar la educación como un vehículo para la mejora social, debe ser uno de los principales retos del gobierno que se forme tras el 26J.

En materia universitaria debemos recuperar un sistema justo de ayudas al estudio que garantice la igualdad de acceso a la educación superior. Esto, acompasado con una reducción de los precios públicos y un incremento de la inversión en educación superior, podrá llevarnos a tener un futuro más justo y próspero para todos.

P.- Otros delegados nos han comentado la dificultad de conseguir compaginar su labor al frente de la Delegación con sus deberes como estudiante. ¿Cómo lo estás viviendo tú?

R.- El puesto de Delegado de Alumnos es bastante incompatible con estudiar, aun así, es un sacrificio que merece la pena. Por suerte, mi carga académica durante este curso ha sido poca, ya que estoy finalizando el Grado. De todas formas reduciendo las horas de sueño todo se puede compatibilizar.

P.- Estudias el Grado de Ingeniería Civil, ¿cómo ves tu futuro profesional? ¿En qué ámbito te gustaría especializarte?

R.- Si académicamente todo sale como debería, el curso próximo empezaré el Máster Universitario en Sistemas de Ingeniería Civil, en la ETSI Caminos, Canales y Puertos, para comenzar a especializarme en el ámbito de la hidrología, la energía y el medio ambiente. Profesionalmente el futuro es algo más incierto.

La ingeniería civil siempre ha sido mi vocación, pero el hecho de haber participado tan activamente en la Universidad ha despertado mi curiosidad por ella, y no descartaría vincularme profesionalmente al mundo universitario.